lunes, 18 de marzo de 2013

Mi primera vez que voy a la escuela en la noche

Hace mucho que no escribo, me tomé unas inmerecidas vacaciones. O bueno, más bien ahora YA estoy haciendo todo lo que debería. Eso me hace muy feliz, mi desorden ordenado.
Ya estoy empezando mi segundo año en la Facultad, quiero que cuando acabe, o en unos  muchos años me tropiece de nuevo con este blog y lo que lea me recuerde qué tal me la pasé. Ya SEGUNDO!!
Ok, cabe mencionar que no sólo el semestre es nuevo, actualmente estoy estrenando un cuarto rojo (Red Room......Redrum ?? Stephen King..??).
Bueno, cada semestre tienes cosas nuevas: útiles, ropa, amigos, clases, gustos, música, problemas, libros...pero todo lo nuevo es muy bueno y bien recibido. Lo viejo cambia, se transmuta en algo diferente, ni mejor ni peor...sólo distinto.
En fin, estoy bien, y creo que conforme avance el semestre estaré aún mejor.
Ésta es la primera vez en mi vida que tomo clases después de las 8 pm. Se sintió bien extraño caminar por CU tan tarde, no es que esté peligroso o eso (aunque sí hay las historias escabrosas de asaltos en los baños de Medicina y no sé qué...pero eso no viene al caso.) pero ver la escuela de noche es como estar en otro lugar completamente diferente. Lo que más sentí diferente fueron las personas....todavía los veo como alienígenas, tienen esa aura extraña de gente que trabaja o que por alguna otra razón no toma clases en la mañana como convencionalmente se hace. Sólo las personas que han pasado toda su vida en el turno matutino como yo entenderán a lo que me refiero.
Hay alguna magia extraña en una escuela cuando oscurece...no se puede explicar, se tiene que experimentar personalmente. Sobre todo si es la UNAM.

Todo lo que está en cursiva lo escribí a principios del semestre pasado pero no lo publiqué. Siempre que leo cosas que escribí hace mucho pienso "¡Qué engañada estaba!" ahora también le añado a mi propia reprimenda el calificativo de "Qué noob".




No hay comentarios:

Publicar un comentario